lunes, 22 de julio de 2013

Viktor Frankl



 
Viktor Frankl


Nació en Viena en 1905 y murió en la misma ciudad en 1977. Fue catedrático de Neurología y Psiquiatría y fundador de la Logoterapia, la tercera escuela vienesa de Psicoterapia. Escribió numerosos libros, entre los que destaca El hombre en busca de sentido, uno de los 10 libros que más influencia han tenido en América, según la Librería del Congreso en Washington.
Pero lo más destacable de Viktor Frank es su condición de auténtico superviviente, después de haber sido internado en diversos campos de concentración por ser judío, el último Auschwitz, hecho que pudo haber evitado.
Su hermana huyó a Australia, su hermano quiso huir a Italia, pero fue detenido y deportado a Auschwitz donde murió junto a su familia. Viktor lo tenía más fácil, puesto que poseía un visado para vivir en Estados Unidos. Pero pensó en lo desprotegidos que quedaban sus padres, puesto que intentó obtener un visado para ellos y no pudo conseguirlo. Él y su joven esposa habrían podido huir y tener un futuro prometedor, pero se quedaron. Un día Viktor entró a meditar a la catedral de San Esteban, se sentó y estuvo dando vueltas al asunto: huir de la barbarie, podía hacerlo, pero dejaba solos a sus padres; quedarse era correr un gran riesgo.
Regresó a su casa y encontró la respuesta, la mejor respuesta: se iba a quedar a ocuparse de sus padres. Al cabo de pocas semanas la barbarie, la maldad sin límites entró a su casa, los detuvieron a todos y los llevaron a campos de concentración. Allí murieron todos menos Frankl, que había entendido muy bien que "prójimo" viene de próximo y que los que están al lado son los primeros prójimos. Porque hay mucha gente que se embarca en ONGs, se van a lo lejano y descuidan a los próximos, que tal vez no dé tanto caché.
Muchos supervivientes de los campos de concentración no pudieron sobrevivir una vez fuera, muchos terminaron en el suicidio, la vida les resultaba absurda. Tal es el caso de Primo Levi que lo hizo bastantes años después. Pero Viktor Frankl, que en bastantes ocasiones tuvo esa tentación, siguió adelante venciendo las muchas dificultades que se le presentaron. Y más que probablemente, como terapeuta y como escritor, haya ayudado a mucha gente. Recuperó el sentido de su vida.

viernes, 12 de julio de 2013

Feliz cumpleaños



 
Platón y Aristóteles


M. A. es mi ser más querido. Se trata de un joven honesto, enemigo de la mentira, incapaz de la traición a un amigo. Es un ser noble y cabal donde los haya. M. A. es un hombre bueno. Y yo me congratulo de los enormes valores que atesora. Nunca responde al mal gesto de un amigo con otro mal gesto. Y siempre pone buenas y sensatas palabras para aplacar al airado.
Aristóteles no escribió la Ética a Nicómaco para su hijo, sino que alguien que ordenó los libros le puso este título en alusión al nombre de su hijo. En esta obra hay mucho espacio, muchas bellas páginas dedicadas a la amistad.

"Es más fácil contemplar a nuestros prójimos que a nosotros mismos, y sus acciones que las propias, y las acciones de los hombres buenos cuando éstos son amigos suyos, son gratas a los buenos... El hombre dichoso necesitará de tales amigos, ya que quiere contemplar acciones buenas y que le pertenecen, y tales son las acciones del hombre bueno amigo suyo".

Aristóteles, Ética a Nicómaco.



viernes, 5 de julio de 2013

Meditación de Marco Aurelio









Dice Marco Aurelio al comienzo del libro II de sus Meditaciones:

"Al amanecer, dite a ti mismo: me voy a tropezar con un indiscreto, un desagradecido, un insolente, un envidioso, un insociable. Todo esto les sucede por su ignorancia del bien y del mal. Pero yo que he visto la naturaleza del bien, que es lo bello, y la del mal, que es lo vergonzoso, y la del mismo que comete la falta, que es de mi género, partícipe no de la misma sangre o semilla, sino de la mente y de una partícula divina, no puedo sufrir daño por obra de ninguno de ellos, pues ninguno me cubrirá de vergüenza; y no puedo enfadarme con un pariente ni odiarlo, porque hemos nacido para una tarea común, como los pies, como las manos, como los párpados, como las hileras de dientes superiores e inferiores. De modo que obrar unos contra los otros va contra la naturaleza y es obrar negativamente enojarse y volverse de espaldas".